De trader principiante a inversor profesional

Inversor Profesional. En el mundo de las inversiones en general los inversores hacen un recorrido que les permite llegar hasta el éxito. Digamos que todos pasan por unos cambios y van evolucionando su estilo de trading hasta que consiguen convertirse de traders principiantes a inversores expertos.

En el siguiente artículo haremos un repaso de todas estas etapas por las que normalmente pasan, o al menos deberían, todos los inversores que se inician en el trading.

Y veremos cómo uno se convierte en un inversor de éxito paso por paso.

Etapa 1. La motivación y la falta de experiencia

Todos los traders cuando se lanzan a los mercados lo hacen con mucha motivación y con ganas de alcanzar el éxito en sus inversiones. La parte negativa es que uno apenas tiene experiencia y eso puede convertirse en un problema.

Con ganas y dedicación es posible convertirse en un gran trader pero la capacitación no es algo que a todos les preocupe, sobre todo al principio.

A menudo se piensa que los conocimientos simplemente se adquieren con el tiempo pero lo cierto es que para empezar en todo, aunque sea de cero, hace falta tener una base sólida.

Sí no conoces el mercado de opciones binarias, por ejemplo, no podrás tener estabilidad en tus operaciones por muy motivado que estés.

De hecho, seguramente tengas lo que se conoce como la suerte del principiante y creas que este tipo de comercio es tan sencillo que podrás recoger unos buenos beneficios sin apenas esfuerzo.

Pero no creas que esto será así, el trading puede ser intuitivo y ciertamente el objetivo de las operaciones trata de analizar las tendencias de los precios, en el caso de operar en opciones, pero realizar predicciones y que sean certeras ya no será tan fácil.

Etapa 2. La exposición al riesgo y las primeras pérdidas

Con la suerte del principiante que decíamos antes tendemos a arriesgarnos más y sin darnos apenas cuenta, ahí está el problema. Las ganas de ganar más y más que todos tenemos al principio pueden poner en serio riesgo el capital que invertimos, y probablemente llegue un momento donde vengan las pérdidas y será cuando lo lamentemos.

Las primeras pérdidas siempre van a darse y depende mucho de cómo se lo tome cada uno para poner solución, aprendiendo de los errores para mejorar.

En esta situación hay traders que son capaces de salir adelante y continuar con sus operaciones y otros en cambio lo dejan todo. Hay muchos inversores que se desilusionan y prefieren dejar a un lado el comercio con opciones, y buscarse otro instrumento financiero para invertir su dinero.

Obviamente yo te animo a que no hagas esto. De hecho si te rindes no podrás tener la oportunidad de recuperar el dinero que has perdido, y me imagino que tú no quieres eso.

Etapa 3. El desarrollo de la estrategia y el trading disciplinado

Ciertamente, como ya hemos dicho, al principio la exposición al riesgo suele ser mayor. Pero a medida que vas operando vas dándote cuenta de lo importante que es controlar la situación y manejarte por los mercados como más te convenga en cada momento.

Las circunstancias de los mercados no siempre son las mismas y hay muchos factores que afectan a las cotizaciones de los precios, por lo que debes estar preparado para todo lo que pueda ocurrir y actuar en consecuencia para tener más probabilidades de éxito.

Es muy importante tener confianza en uno mismo pero también hace falta ser disciplinado y no dejarse llevar por las emociones.

Asimismo será necesario actuar en los mercados con la estrategia y técnicas de trading adecuadas, ya que sólo de esta manera podrás conseguir un equilibrio en tu cartera de inversión y que tus beneficios estén siempre por encima de tus pérdidas.

Todos los traders han empezado alguna vez en los mercados, no todos han nacido siendo unos expertos. Puede ser que algunos sean más rápidos aprendiendo o que tengan ese don natural para invertir, pero absolutamente todos empezaron una vez de cero.

Y normalmente este el resultado de una evolución que transcurre por estas etapas que acabamos de citar.

 

En resumen

• En la primera etapa los inversores llegan con ganas de darle rendimiento a su capital pero por falta de experiencia no lo hacen tan bien como deberían. La ventaja y el gran problema que suele ocurrir es que sí tienen suerte al principio y recogen beneficios creerán que operar en los mercados es fácil. Y no lo es.
• En la segunda etapa el inversor se da cuenta de que no es tan fácil. Al principio se exponen en exceso a los riesgos y tienen sus primeras pérdidas. Ahí pueden ocurrir dos cosas, que lo dejen todo o que traten de continuar y mejorar. Ésta sería la actitud para llegar a la tercera etapa.
• En la tercera etapa ya deberían haber aprendido que dejarse llevar por las emociones no es muy bueno y por eso empezarán a actuar de manera disciplinada. En este punto es donde los inversores se preocupan por el plan de inversión y la estrategia, con la que conseguirán sacarle el máximo partido al dinero en sus inversiones.